El Compliance es un conjunto de procedimientos y buenas prácticas adoptados por las organizaciones para identificar y clasificar los riesgos operativos y legales a los cuales se enfrentan y establecer mecanismos internos de prevención, gestión, control y reacción frente a estos.

Además de evitar o atenuar la responsabilidad penal, disponer de un Compliance puede reportar a las empresas otros beneficios, como mejorar el posicionamiento de una empresa en la hora de participar en un concurso público o licitación, asegurar el patrimonio creado y facilitar un entorno de trabajo seguro y responsable.