Meta ha anunciado en su evento Meta Connect 2023 sus nuevas gafas inteligentes en colaboración con Ray-Ban. Es la segunda generación de las Ray-Ban Meta Smart Glasses, que han sido diseñadas por EssilorLuxottica y se pondrán a la venta en EEUU el próximo 17 de octubre con un precio inicial de 299 dólares (no se sabe aún cuánto costarán en España).
La combinación de la experiencia de un gran fabricante de gafas como Ray-Ban con una plataforma tecnológica puntera ha dado a luz un producto tremendamente avanzado, con posibilidades muy bien infinitas y a un precio asequible.
Las especificaciones técnicas son, sencillamente, brutales. Cámara mejorada de 12 MP, emisión en directo en Instagram y Facebook, audio mejorado, llamadas y mensajes, comandos de voz, touchpad y botón de captura, estuche de carga y, naturalmente no podía faltar, Meta AI para encontrar la información en el momento preciso desde tus gafas. Dispone también de una App dedicada.
Y el diseño es Ray-Ban. Con eso lo decimos todo. Desde el estuche casi convencional (pero que almacena 8 cargas) hasta dos diseños icónicos: Wayfarer y Headliner, en diferentes colores. Son ligeras, a la moda y con más de 150 combinaciones de monturas y cristales. Y, naturalmente, se pueden graduar a petición.
Y, hasta aquí, la parte brillante de la noticia. Pero, como las monedas, todo tiene dos caras. Y el reverso es, como casi siempre, la privacidad. No olvidemos que estamos hablando de Meta, una compañía que se ha destacado siempre por tener un absoluto desprecio por los datos personales de sus usuarios.
Sólo hay que recordar el escándalo de Cambridge Analytica que desveló que la empresa accedió indebidamente a datos de millones de usuarios de Facebook para influir en las elecciones.
Y, desde la entrada en aplicación del RGPD en 2018, Meta ha enfrentado multas récord y litigios relacionados con la privacidad de los datos en varios países, incluidos Estados Unidos y los países miembros de la Unión Europea, debido a su gestión de la información del usuario. Estos han incluido problemas con el consentimiento del usuario y el compartir datos con terceros sin permiso explícito.
Otro problema importante que tiene Meta es el uso de datos del usuario para hacer publicidad dirigida, mediante, algoritmos para mostrar contenido y anuncios personalizados. Esta práctica ha levantado críticas en relación con la privacidad y la autonomía del usuario.
Tantas han sido las críticas y tanto el debate en los medios o en las redes que, finalmente, Facebook tuvo que cambiar su nombre corporativo a Meta.
Y, ahora, tras la iniciativa del Metaverso (que de momento no arranca), presenta la segunda generación de gafas inteligentes. Y, claro, lo primero que pensamos es en el horror de millones de usuarios recopilando datos, en todo momento y lugar, en foto, vídeo audio y subiéndolas en directo a las redes sociales.
Tendremos que ver la Política de Privacidad de Meta por este supuesto pero, permitidme no ser muy optimista, vista su trayectoria hasta ahora. Eso sí, las gafas son una «pasada» y quién sabe si tendrán éxito y pronto todos llevaremos gafas inteligentes con la misma naturalidad que llevamos reloj.
De momento, pero, cuidaos!